jueves, 24 de septiembre de 2009

El Zen

Ufff... estos últimos días he tenido los tremendos cambios de ánimo, las emociones a full todo el rato, nudo en la guata, de todo, así que ni me he molestado en huevear acá, hubiera sido demasiado bipolar. Pero ya pasó la tormenta, y ahora viene la calma... al fiin! Sufrí pensando todos estos días puras leseras, pasándome veinte mil rollos, así todo mal, pero hoy se aclaró todo (no daré detalles acerca del asunto, solo diré que me desenrrollé, je)... Aunque en todo caso la calma no vino por la aclaración del conflicto. Bueno, en realidad sí, pero no por el resultado, sino por el hecho de saber qué pasaba en realidad, haya sido bueno o malo el resultado (me entienden?). No sé, en verdad, me di cuenta de que no quería seguir hueveando con la misma tontera, que no quería pegarme en lo mismo, que estoy chata de andar todo el rato al borde del llanto y tratando de estar feliz, que ya no vale la pena seguir ahí esperando algo que no va a pasar (o por lo menos no dentro de haarto tiempo, de eso estoy segura), que me merezco darme nuevas oportunidades y vivir tranquila, por Dios!! Este es mi momento, es el momento de encontrar el equilibrio, de sanarme, de volver a empezar, de ver la luz y todas esas cosas que suenan a Zen... Me siento mucho más liviana de adentro, ahora quiero preocuparme de mí, de mi futuro (bueno, de eso un poco menos), de vivir, soñar, reír, preocuparme de sentirme bien y aprovechar el presente, al más puro "Carpe Diem", porque la vida es ahora... Si no, cuándo?

No hay comentarios:

Publicar un comentario

marcando territorio

Todo lo que está escrito en este blog son pedazos chorreados de mi propia conciencia (o inconciencia) y tengo todos los derechos del mundo sobre mis palabras, ok?
Prohibido copiar, plagiar y/o imitar mi súper estilo, mis ideas o cualquiera de las huevadas que hablo, porque mis pensamientos son únicos, y al que no le guste, chabela.